Las observaciones realizadas por la autoridad a los contribuyentes, pueden resultar complicadas de desvirtuar; partiendo del hecho de que son diversos los motivos por los cuales el SAT presume operaciones. Un ejemplo de lo anterior es la presunción que establece que la autoridad podrá presumir que los depósitos en la cuenta bancaria del contribuyente son ingresos y valor de actos o actividades, cuando estos no correspondan a registros en la contabilidad. Sin embargo, no siempre la presunción es correcta, ya que se puede dar el caso de traspasos entre las propias cuentas del contribuyente, que no deben ser considerados como ingresos acumulables, por lo que será necesario que el causante desvirtúe la aseveración realizada por la autoridad.
Algunos de los elementos de probanza que puede aportar el contribuyente para desvirtuar dicha situación son:
Estados de Cuenta, Papel de trabajo, Copia del recibo donde se especifique: monto, cuenta de donde proviene el depósito, forma de pago, número de cheque o reporte de transferencia, origen del importe depositado, entre otros. Ofrecer la prueba pericial contable